Vaporizaciones vaginales: ¿Qué son y cómo se hacen?
Las vaporizaciones de yoni son una herramienta ancestral usada por parteras y curanderas. En la tradición maya pero también en otros lugares como Corea, se consideraba que estos baños de calor ayudaban a regular el ciclo, a reducir las hemorroides, prevenir el dolor relacionado con la menstruación y prevenir la zona de infecciones; también para el tratamiento de amenorrea, dismenorrea, ovarios poliquísticos, etc. Sin embargo, los vapores pueden usarse también simplemente como una herramienta de autocuidado. Se pueden hacer en casa, son fáciles de llevar a cabo y económicamente muy asequibles, y nos permiten conectar con el automimo y el placer.
A efectos prácticos, se trata de llevar agua a ebullición, agregarle plantas medicinales apropiadas y proceder de manera similar a cuando se hacen vahos para la tos: quitarnos la ropa interior, cubrirnos con una manta o toalla para evitar que se escape el vapor, y colocarnos de rodillas o en una postura que nos sea cómoda para estar unos 10 minutos.
Pasos a seguir
- Llevamos a ebullición 1L de agua
- Añadimos 2-3 cucharaditas de la mezcla de hierbas seleccionada, bajando el fuego al mínimo. Esperar 3 minutos
- Apagamos el fuego, tapar y dejar reposar 3 minutos más
- Pasamos la mezcla a un bol
- Escogemos un lugar tranquilo y cómodo
- Sin ropa interior y tapándonos con una manta, toalla o falda larga que evite que se escape el vapor, nos colocamos de rodillas en una postura cómoda con cojines o mantas y aguantamos allí unos 10 minutos hasta que el vapor desaparezca
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